Y ahora, ¿cómo me borro este tatuaje?

Aunque se trata de un proceso lento, el láser puede ser el método idóneo para remover los tatuajes

Así como hay diversas razones para hacerse un tatuaje -que pueden ir desde el amor hasta la rebeldía- también hay muchas otras justificaciones para querer borrarlo.

Palabras mal escritas, fechas incorrectas, nombres de personas con las que ya no se guarda una relación, un trabajo mal realizado y hasta el deseo de reemplazar un tatuaje por otro son solo algunas de las motivaciones que llevan a una persona a querer borrar esa marca de su piel.

“Lo veo bastante cuando las personas cambian de pareja y se habían tatuado el nombre esa persona con la que ya no está compartiendo. Hay otras razones, como un nuevo trabajo en el que no se ve bien que una persona esté tatuada.
Otros quieren borrarlos porque entran a una religión que no los permite y otras veces es porque se hacen tatuajes erróneos”, señala el doctor Luis Ortiz Espinosa, dermatólogo y director médico de Nova Derm.

La remoción de tatuajes se hace utilizando la tecnología láser y ha ido avanzando con el paso del tiempo. El dermatólogo recuerda que hace 20 años comenzó a remover tatuajes utilizando el láser rubí, luego llegó el alexandrita y ahora el más utilizado es el ND Yag de doble frecuencia que permite un trabajo más preciso.

Lo último en este campo es el picosure laser, que según Ortiz Espinosa, remueve casi todo color.

“No se puede prometer una remoción total. Todo va a depender del tatuaje. Por ejemplo, uno con muchos colores y pigmentos es difícil de remover. Un tatuaje en piel oscura es más difícil de remover porque si es muy extenso o si no se hace con cuidado la persona puede terminar con un área blanca. Lo que más puedes remover son negro, azul, verde. Para el rojo hay que usar otro tipo de láser como el de doble frecuencia”, asegura.

Cómo se remueve un tatuaje

El dermatólogo explica que es en la dermis (segunda capa de la piel) en la que se deposita el pigmento del tatuaje y una vez allí queda rodeado por las células de la piel que lo protegen. El láser llega hasta esa capa de piel y “revienta ese pigmento, se hace como gravilla y la piel lo puede reabsorber” para luego eliminarlo del sistema nos solo a través de la epidermis, sino también por medio de la orina, el sudor o hasta la saliva.

tatuaje

“La energía del láser es absorbida por el pigmento que se ha depositado previamente y va a depender del color para que sea absorbido por el largo de onda. Cada color absorbe en un largo de onda diferente”, añade.

Largo proceso

Ortiz Espinosa señala que algo muy común entre los pacientes que llegan a su oficina buscando este procedimiento es que tienen la idea errónea de que se trata de algo rápido y desconocen que se requiere de múltiples sesiones para eliminar la tinta de las diferentes capas de la piel. Esas sesiones de láser deben hacerse de manera periódica para dar tiempo a la que la piel reabsorba el pigmento.

Por lo general, hay que dejar pasar entre seis y ocho semanas entre un tratamiento y otro. La cantidad de sesiones requeridas dependerá de la extensión y la tinta que se haya utilizado en el tatuaje. Mientras más grande y más oscuro, más difícil de eliminar.

“La mayoría de los casos desde la primera sesión ven algo de cambio, pero no es hasta la cuarta sesión que comienzan a ver el cambio. Se habla de que el promedio de los tatuajes fluctúa entre seis y 12 tratamientos para ser eliminados, pero eso puede variar entre personas”, menciona.

El costo varía de acuerdo al tamaño, la profundidad y el tipo de tatuaje. Por ejemplo, una pulgada cuadrada puede costar entre $75 y $100 por sesión, mientras que la remoción de un tatuaje del tamaño de la palma de la mano puede costar unos $400.

– Liz Sandra Santiago

En esta nota

Moda tatuaje Tips de moda
Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain