No es fácil ser un latino republicano en California

Son cada vez menos y los que hay, o han dejado el partido, o están inconformes con las opciones. Algunos fieles a Trump encuentran las críticas de sus amigos.

Germán y Don son dos caras diferentes de una misma moneda.

Ambos latinos y residentes del sur de California, han simpatizado durante buena parte de su vida adulta con el partido republicano.

Uno es un texano de hueso colorado, veterano del cuerpo de infantería de marina (U.S. Marines), siempre fue republicano hasta que, dice, “los republicanos comenzaron a volverse locos”.

El punto sin retorno para él fue la candidatura de George W. Bush en 2000. “Para mí, ese señor no debía ser presidente. Además no me gusta que los republicanos pasaron de ser el partido de la responsabilidad personal y de elevar a la gente, al partido de mantener a la gente pisoteada y del egoísmo”, contó Don Garza.

“Siempre fui republicano, mantenía mi registro, hasta que por fin lo dejé. El tema de inmigración fue lo que me terminó de alejar, no puedo votar en contra de los intereses de mi propia gente”, agregó Garza, quien nació en el sur de Texas pero ahora vive en Los Angeles. “Trump ya es el colmo”.

Germán, sin embargo, es otro cantar.

Un inmigrante venezolano que vino a Estados Unidos hace 30 años a competir en artes marciales y se convirtió en campeón nacional, fue demócrata por poco tiempo, pero luego se pasó al partido republicano. Vive en Irvine, en el condado de Orange. 

Tiene muy claro a quien quiere votar en las primarias del 7 de junio y a quién favorece para presidente del país.

“Donald Trump”, dice. “Me gusta que Trump está defendiendo los intereses de los Estados Unidos. Estoy cansado de que los ilegales (sic) estén haciendo demandas y ni siquiera hablan el idioma. Yo pasé de ser turista, a estudiante, a residente y luego ciudadano”.

Siendo inmigrante que “pasó por el sistema”, Germán Hernández no tiene ninguna simpatía por la gente sin papeles y piensa que son nocivos para el estado.

Germán sabe que los latinos como él no abundan. “No, no conozco a muchos latinos republicanos, la mayoría son demócratas”, concede.

El porcentaje de latinos que votaría por Trump, de acuerdo a varias encuestas, es menor del 10%. En realidad, sólo un 25% de los latinos están registrados o dispuestos a votar por el partido republicano y muchos no están con Trump, ni con Cruz. 

“Hasta mi mejor amigo me critica, también es latino, dentista”, dice Germán. “Pero él sabe que yo hice las cosas bien para venir acá así que poco puede decir. Yo pago impuestos para que los ilegales reciban beneficios”.

Según las cifras de la más reciente encuesta de Fox News, sólo 19% de los latinos que son votantes registrados están seguros de votar en la primaria republicana. La gran mayoría de los registrados y de los latinos que votarán en Junio, son demócratas.

Hasta ahora no hay señales de que los candidatos republicanos a la presidencia, que se reúnen este fin de semana en Burlingame, cerca del aeropuerto de San Francisco, para su convención estatal, van a dedicar recursos ni esfuerzos en el voto latino del estado.

No obstante, el director de campaña de Trump en California, Tim Clark, dijo recientemente que no descartaba usar algún comercial en español o llamadas automatizadas (robocalls). Y Ted Cruz tiene su sitio web en español, pero hasta ahora no ha hecho ningún esfuerzo por llegar a medios latinos.

Para Luis Alvarado, un consultor republicano de Los Angeles que no apoya a ninguno de los precandidatos, esa declaración de Clark sobre comerciales en español es risible.

“Casi me muero de risa cuando leí eso”, dijo Alvarado. “Si lo hace no va a ser por influenciar al votante latino sino para que los medios lo cubran”.

El consultor apuntó que Cruz podía hacer promoción por medio de sus relaciones con las iglesias evangélicas latinas que abuntan en el estado, pero no descartó que haya distritos que voten por Kasich, sobre todo en las zonas urbanas en ciudades más “liberales”.

La distribución de delegados republicanos en la primaria de junio es por distrito: 53 distritos con tres delegados cada uno.

Pero muchos votantes latinos republicanos son como el mismo Alvarado: no apoyan a ninguno de los tres. 

“Hay mucha gente en el partido, moderados y latinos, que está muy afligida por las opciones que hay a nivel presidencial”, dijo.

Las encuestas más recientes en California ponen a Trump arriba con 49% del voto de los republicanos del estado, Cruz con 22% y Kasich con 18% (Fox News) y eso fue antes de sus abrumadores triunfos del martes pasado.

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