Clinton tiene ventaja en el “Súper martes”, pero Sanders aún no tira la toalla

WASHINGTON.- El calendario de primarias demócratas a partir del “Súper martes” la próxima semana tiende a favorecer más a Hillary Clinton, pero la campaña de Bernie Sanders, que se prepara para una posible derrota este sábado en Carolina del Sur, promete mantener la pelea “hasta el final”.

Sanders tiene escasas posibilidades de ganar en la primaria del sábado en Carolina del Sur, un estado con una fuerte minoría afroamericana que prefiere a Clinton. Pero, aún así, el senador independiente por Vermont tiene de su lado al rapero y activista “Killer Mike”, quien hoy mismo inició una gira en el estado para ayudarlo.

Según un promedio de encuestas de “Real Clear Politics”, Clinton tiene un apoyo del 57,4% en Carolina del Sur, frente al 33,3% de Sanders, mientras que a nivel nacional la diferencia es de 47,2% contra 42,2%, respectivamente.

Es que tras su abrumadora victoria en New Hampshire y una derrota con un margen de cinco puntos en Nevada el sábado pasado, poco ha cambiado en la narrativa de la campaña de Sanders: sigue generando gran entusiasmo entre los votantes jóvenes y ha mejorado entre los hispanos, pero no hace avances entre los votantes afroamericanos.

Sanders participó hoy en un foro comunitario en Flint (Michigan), una ciudad de mayoría afroamericana golpeada por una fuerte crisis de agua potable y una escasa inversión en la infraestructura, donde reiteró su conocido discurso sobre las desigualdades salariales.

Buscando una sorpresa en el “Super martes”

Por ello, en el naipe de posibilidades, Sanders tiene el reto de continuar sumando victorias a partir del “Súper martes” la próxima semana, cuando 12 estados y territorios realicen primarias y estarán en juego 1,004 delegados demócratas para la convención del partido en julio próximo.

La lista de estados con primarias para ambos partidos el martes próximo incluye Alabama, Arkansas, Georgia, Massachusetts, Minnesota, Oklahoma, Tennessee, Texas, Vermont y Virginia, además de las “asambleas” republicanas de Alaska y las demócratas en Samoa.

Pero Clinton llegará al martes con ventaja porque la mayoría de los 130 “super delegados” también en juego -los que no tienen obligación de apoyar al ganador en sus estados- ya le han dado su respaldo.

De momento, Sanders tiene prácticamente garantizada una victoria en su estado, Vermont, donde cuenta con el apoyo del 75% del electorado, mientras que Clinton tiene amarrado el apoyo de los votantes de Arkansas, donde fue primera dama cuando su esposo, Bill Clinton, fue gobernador.

En el complejo sistema de primarias, los delegados demócratas son repartidos de forma proporcional al porcentaje de votos en cada distrito electoral, y las encuestas apuntan a que Clinton tiene más probabilidades de ganar que Sanders, especialmente en Texas, donde los hispanos conforman el 39% de la población y el 28,1% del electorado.

De todos los estados en disputa, el “premio mayor” es, sin duda, Texas, que tendrá en juego un total de 155 delegados republicanos y 252 demócratas.

Aparte del reto aritmético de Sanders, las primarias entre el 5 y 26 de marzo próximos suponen otro problema para Sanders porque éstas coincidirán con las vacaciones primaverales de los estudiantes universitarios, el bloque electoral que le ha dado alas a bando.

Larry Sabato, analista político de la Universidad de Virginia consideró que, tomando en cuenta el controvertido sistema de primarias y la asignación de delegados, Sanders tiene pocas posibilidades de ganar terreno de forma considerable el próximo martes, salvo que ocurra algo que altere la dinámica actual.

La campaña de Sanders rechaza que se le esté acabando el tiempo y, por el contrario, en los últimos días ha redoblado sus esfuerzos en algunos de los estados del “Super martes” donde tiene más probabilidades de ganar, como Colorado, Minnesota, Oklahoma y Massachusetts.