La odisea de Robleto en Estados Unidos comenzó cuando una expareja lo acusó de violencia doméstica.
En los siete años que ha vivido en Nicaragua, Robleto echó mano de su buen manejo del inglés para sustentarse económicamente. Impartió clases particulares y trabajó en varias academias. También contrajo matrimonio y tuvo tres hijos.
Aún siendo ciudadano, no intentó regresar a Estados Unidos hasta que su problema no fuese resuelto. Incluso debió obtener su pasaporte nicaragüense para evitar el pago de multas en su país natal. Esto debido a que al ser ciudadano estadounidense había superado el tiempo de estadía en Nicaragua.
“El sistema me enseñó a ser superpaciente (…) No quiero vivir escondiéndome de la ley. Quería llegar (siendo) legal”.
Este miércoles, Robleto por fin viaja a Estados Unidos con su pasaporte en mano. “Voy directo al aeropuerto, ya tengo mi pasaporte. Estoy feliz”, afirmó a Univision Noticias antes de partir.
El nicaraguense ahora pide ayudo del público para reconstruir su vida en EEUU. Quien quiera realizar un donativo, visite la siguiente página: https://www.gofundme.com/rgmeqs4k