Ciudad de México enfrenta una de sus peores crisis de agua

MÉXICO.- A más de 100 kilómetros de la capital mexicana, los trabajos de ingenieros, albañiles, técnicos, contratistas y policías en medio de la vegetación no parecen tener relación con las pancartas que se alzan por las calles de Iztapalapa, una de las demarcaciones más pobres de la urbe, o en los cuchicheos amargos de colonias de clase media alta como la Condesa.

Pero los tiene. De hecho, cada grupo, a su manera, quiere lo mismo: “Agua”.

El líquido vital que cada vez se escasea más en la Ciudad de México y

por un programa de recortes de abasto sin precedentes que durará una semana hasta que todo vuelva a la normalidad el 6 de febrero.

“No podemos hacer nada para evitarlo”, dijo el jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera para responder a diputados locales que pidieron “aplazar” las obras en del sistema Cutzamala, el principal proveedor de agua de la capital que parte del Estado de México, una de las obras ingeniería hidráulica más complejas.

A partir del 28 de enero habrá un corte al suministro del Sistema Cutzamala por mantenimiento #mm pic.twitter.com/962YZ0k2QM

— Miguel Ángel Mancera (@ManceraMiguelMX) January 27, 2016

//platform.twitter.com/widgets.jsAhí, todos los días el agua tienen que ser bombeada desde una presa a la altura del nivel del mar hasta 1,100 metros en la localidad de Cutzamala, donde se potabiliza para volver a bombearse más arriba, a 2701 metros, para que la gravedad la distribuya hasta llegar a los nueve millones de habitantes de la capital.

El sistema, que inició en 1962, ha funcionado – independientemente de la sobreexplotación de los mantos que se encuentran a la mitad de su capacidad- pero hay que mantenerlo, parcharlo, reforzarlo, renovarlo.

Hasta el restablecimiento del suministro de agua deberemos hacer un esfuerzo y utilizarla para lo más relevante https://t.co/C2lmCvZ5E9 #mm — Miguel Ángel Mancera (@ManceraMiguelMX) January 29, 2016

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José Luis Jardines, director local de Agua Potable y Saneamiento, advirtió recientemente a la prensa que, además del recorte actual, son necesarios cuatro más para garantizar el servicio, sin embargo, ante las inconformidades que causa la falta de agua entre los capitalinos, siempre se lo piensen dos veces.

Cada año, la Ciudad de México realiza algunos cortes de agua y, aunque ninguno había sido tan generalizado como el presente, las molestias son las mismas: manifestaciones y bloqueos de avenidas, sobre todo en las delegaciones más pobres que resultan ser las más afectadas.

Mientras tanto, en el camino del Cutzamala se sueltan a las grúas, trascabos, excavadoras, camiones, compactadoras y demoledoras para picar tierra, reforzar los antiguos tubos con acero (y así evitar que los constantes sismos los dañen), cambiar bombas, montar concretos y otros detalles que sostienen un sistema que se prevé colapsará tarde o temprano.