Patrulla Fronteriza rechaza desplegar cámaras corporales a gran escala

Activistas critican más demoras y estudios para despliegue de cámaras para rendición de cuentas

patrulla-fronteriza_655x438

Crédito: Archivo | Getty Images

Washington.- Los agentes de la Patrulla Fronteriza por ahora no usarán cámaras corporales a gran escala y su eventual despliegue “en base a riesgo” dependerá de una evaluación adicional en consultas con el sindicato, anunció este jueves el comisionado de la Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras (CBP), Gil Kerlikowske.

En conferencia telefónica con la prensa,  Kerlikowske afirmó que su agencia “no se opone a las cámaras” -tiene cerca de 9,000 cámaras fijas y portátiles a lo largo de la frontera-, pero se requiere más estudio y no se puede “imponer un requisito” sin consultar al sindicato de los agentes fronterizos.

“Estamos evolucionando constantemente y estamos comprometidos con probar la tecnología de forma rápida“, aseguró Kerlikowske. “Vimos muchos aspectos positivos con las cámaras y seguiremos adelante en todos los frentes”.

La CBP realizó un “estudio de viabilidad” sobre diversos tipos de cámaras  durante un año, y determinó que las utilizadas  no eran las más convenientes sobre el accidentado terreno y condiciones en que trabajan los agentes.

Según Kerlikowske, el despliegue de cámaras corporales a gran escala no es necesario porque la Patrulla Fronteriza ya tiene cámaras fijas y portátiles en diversos puntos de control en la frontera, y la idea es identificar los puntos donde las cámaras puedan complementar las operaciones.

Más estudios

Por ello, explicó,  la siguiente fase de esta revisión -a completarse entre enero y marzo de 2016- , se continuarán las pruebas con las cámaras portátiles y fijas en puntos de control, puestos de inspección aérea, puertos marítimos y en  operaciones de salida en puertos de entrada.

La CBP quiere asegurarse de que se toman en cuenta asuntos relacionados con el despliegue de las cámaras, el almacenaje de videos recopilados, capacitación de agentes, financiación, y protección de la privacidad de los agentes.

Sin dar detalles sobre cuántas cámaras se desplegarán, dónde o cuándo, ni cuántos agentes las usarán, otra funcionaria de la CPB indicó que el programa costará “como mínimo, decenas de millones de dólares”.

Con un presupuesto anual de casi $13,000 millones, y 60,000 empleados -incluyendo 21,000 agentes en la frontera sur, la CBP es la mayor fuerza policial en EEUU, y durante años ha sido objeto de críticas por uso de la fuerza letal contra inmigrantes.

El sindicato de la Patrulla Fronteriza no respondió a múltiples solicitudes para comentarios.

Activistas decepcionados

Consultados por este diario, varios activistas afirmaron que las cámaras contribuyen a la transparencia y señalaron que el propio “Grupo de Trabajo sobre Prácticas Policiales para el Siglo 21” recomendó en un informe de mayo pasado una serie de medidas, incluyendo el uso de tecnología, para fortalecer las relaciones comunitarias.

Decenas de departamentos de policía en el país han comenzado a usar las cámaras corporales, especialmente tras los disturbios raciales en Ferguson (Missouri) y quejas por la brutalidad policial contra minorías.

“Nos preocupa profundamente la falta de compromiso de la CBP de solicitar a la Casa Blanca recursos dentro del presupuesto del presidente (Barack Obama) para desplegar de inmediato estas cámaras, particularmente en comunidades donde la Patrulla Fronteriza entra en contacto con los habitantes”,  dijo Christian Ramírez, director de la Coalición de Comunidades de la Frontera Sur (SBCC, en inglés).

 “No es Gran Hermano”

Para Chris Rickerd, un abogado en Washington de la Unión de Libertades Civiles de EEUU (ACLU),  el uso de las cámaras no supone una amenaza para el sindicato de la agencia.

“No se trata de un ´Gran Hermano´. Son cámaras para identificar incidentes significativos o quejas por sus operaciones, y puede ayudar a resolver quejas. No creemos que esto será una barrera para la labor que realizan los agentes”, explicó.

Según Rickerd, la CBP “no se ha ganado el beneficio de la duda” y aunque no está rechazando por completo las cámaras, “tampoco siente urgencia de desplegarlas, ni tiene un plan claro de dónde y quiénes las usarán”.

“Distinto sería si tuviera  un récord impecable, pero tiene un pésimo historial de abusos, y estas cámaras les ayudarían a reconstruir la confianza con las comunidades en la zona fronteriza”, explicó Rickerd.

¿Cuántas estudios hacen falta?

Por su parte, Vicky Gaubeca, directora del Centro Regional para Derechos de la Frontera, de ACLU en New Mexico, consideró que la CBP ya realizó suficientes pruebas con las cámaras sobre el terreno, y no se justifican más demoras.

“Me parece que solo están prolongando innecesariamente el despliegue de estas cámaras…creo que les preocupa lo que puedan captar estas cámaras, y no están convencidos por completo de que su uso es una buena práctica policial”, dijo.

“¿Por cuánto tiempo seguirán probando estas cámaras? Creo que deben empezar a usarlas ya, especialmente por los problemas que han tenido en el terreno”, subrayó Gaubeca, cuyo grupo recomendó el uso de las cámaras con las debidas protecciones de la privacidad de los agentes y del público.

Presiones ciudadanas

Grupos como la ACLU y la SBCC han presionado por el uso sistémico de las cámaras corporales a raíz de incidentes de violencia en la frontera, que han dejado al menos 40 muertos desde 2010.

La SBCC mantiene una petición en línea dirigida al presidente Barack Obama, para exigir el uso de las cámaras en todos los agentes fronterizos, tras la brutal muerte de Anastasio Hernández Rojas el 28 de mayo de 2010 en el puerto de San Ysidro (California).

Hernández Rojas fue golpeado y electrocutado frente a testigos, pero los fiscales federales anunciaron que no presentaron cargos criminales contra los agentes de la Patrulla Fronteriza por falta de suficientes pruebas,  indicó la petición.

Su viuda, María Puga, cree que si los agentes hubiesen cargado cámaras en sus uniformes, su esposo estuviese con vida, o habría pruebas para que los agentes rindieran cuentas por su muerte.

La junta editorial del diario “The San Diego Union-Tribune”  afirmó que la Patrulla Fronteriza debe adaptarse al siglo 21, porque “las viejas normas ya no son aceptables”.

En esta nota

cbp indocumentados inmigrantes Patrulla Fronteriza

Suscribite al boletín de Política

Recibe gratis las noticias de política e inmigración diariamente en tu email

Este sitio está protegido por reCAPTCHA y Google Política de privacidad y Se aplican las Condiciones de servicio.

¡Muchas gracias!

Más sobre este tema
Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain