Goteo de cambios para evitar horarios erráticos

Urban Outfitters dará a los empleados los horarios con, al menos, una semana de antelación

Las tiendas de Urban Outfitters  cambian sus prácticas de horarios en el último minuto En Nueva York

Las tiendas de Urban Outfitters cambian sus prácticas de horarios en el último minuto En Nueva York Crédito: Shutterstock

La subida de los salarios mínimos, el derecho a sindicalizarse sin represalias y la necesidad de tener horarios previsibles han sido las grandes demandas de muchos de los trabajadores del sector servicios en los últimos años. Algunos pasos se han dado en las dos primeras y poco a poco se avanza en la última. Algunas veces gracias al impulso público.

Desde la oficina del fiscal general de Nueva York, Eric Schneiderman, se ha informado que tras varias conversaciones con los gestores de la tienda de moda y complementos Urban Outfitters estos se han comprometido a acabar con los horarios erráticos a partir de noviembre en todos sus locales en Nueva York. Ese mes empieza un proceso en fase transitoria para poner fin a los turnos de guardia para los empleados.

La decisión de Urban Outfitters se enmarca en una acción iniciada por el fiscal que ha dado lugar a un goteo de cambios en esta cuestión de los horarios.

En abril, Schneiderman envió cartas a varias cadenas comerciales como Gap, J. Crew, Abercrombie & Fitch y Target, entre otras, pedir información sobre cómo gestionaban sus horarios para los empleados. Las respuestas han mostrado que un buen número de tiendas tienen turnos de última hora para sus empleados por hora. Es decir, muchos de ellos son notificados apenas la noche anterior o con pocas hora de antelación si se les requiere en el puesto de trabajo.

Con horarios cambiantes en el último momento, o las guardias, que son frecuentes en tiendas y restaurantes, los trabajadores tienen problemas para planificar sus vidas, es difícil tener un segundo empleo o saber si se necesita la ayuda de alguien para cuidar  de hijos u otros miembros de la familia, por ejemplo.

Los gestores de Urban Outfitters se han comprometido a dar a los empleados los horarios “al menos una semana antes del inicio de la semana laboral”.  “Los trabajadores merecen protecciones básicas, incluyendo un calendario de trabajo confiable que les permita programar su presupuesto de manutención, arreglos para las necesidades de cuidado de niños y planificar sus días”, explica en un comunicado Schneiderman.

Urban Outfitters es el quinto gran minorista que acaba con estos turnos imprevisibles. Antes que esta tienda lo han hecho Abercrombie &Fitch, Bath & Body Works, Gap y Victoria Secret.

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