Ford está a la vanguardia de la movilidad mundial

Cuando en los años 50 se empezaron a desarrollar las autopistas y los suburbios para desconcentrar gente de la ciudad. Entonces se pensó como una solución real para los próximos 100 años o más, pero no lo fue.

Hoy las autopistas están congestionadas en casi todas las ciudades del mundo y soluciones como trenes, carriles especiales para buses y vehículos con más de dos personas, no ha mejorado mucho el problema.

Entre otras alternativas viables está compartir vehículos bajo demanda de transporte, opción liderada por empresas como Uber, Zipcar, Lyft y Turo.

Si bien estos servicios son actualmente una alternativa atractiva para muchos clientes que residen en zonas urbanas, ¿cómo cambiará cuando el impacto demográfico cambie el modelo de negocio? ¿Será el mismo enfoque trabajar a nivel mundial? ¿Cuáles son las razones detrás de su valor percibido para los consumidores y cómo las grandes empresas automovilísticas encajan en el cuadro de la movilidad del futuro?

Ése es el tipo de preguntas que el gigante de Detroit, Ford Motors, quiere responder mediante la adopción de un enfoque diferente para compartir vehículos, centrado en la mejora de la experiencia más allá de simplemente ofrecer una forma alternativa de transporte.

Ford ha puesto en marcha varias iniciativas en el mundo encaminadas a la comprensión de cómo el comportamiento del consumidor está cambiando, mediante la experimentación con formas alternativas en la propiedad de los automóviles, al compartir modelos para identificar soluciones a largo plazo que mejoren la experiencia del cliente.

En Nueva York y Londres, a través de un servicio de minibuses de primera calidad que ofrece transporte a la carta, está el “traslado social dinámico” un experimento de Ford que tiene como objetivo comprender la dinámica social y las necesidades del enrutamiento del transporte compartido.

Ford apunta a reducir costos, mejorar la eficiencia y responder a las necesidades individuales, así como identificar la oportunidad de espacios en blanco entre los servicios de autobuses urbanos tradicionales y servicios de transporte personales por demanda.

Si bien hay muchos servicios de auto compartido basados en un modelo de reserva, otro sistema de conducir en la ciudad bajo demanda busca optimizar de manera inmediata, la necesidad de un vehículo en Londres.

Con la capacidad de reservar con 15 minutos de antelación y planes para ofrecer estacionamiento garantizado en varios lugares alrededor de la ciudad, Ford espera dar cabida a muchos más tipos de viajes con cero o bajas emisiones de vehículos.

En Alemania, “Ford CarSharing” es el primer programa respaldado a nivel nacional por el fabricante, que no sólo sirve a clientes en las áreas metropolitanas, sino que pretende dar cabida a las personas que viven en las zonas rurales mediante el aprovechamiento de los concesionarios locales de Ford.

A través de la asociación única de Ford con Flinkster, Ford CarSharing permite acceder a la flota de Ford a 270,000 clientes de Flinkster.

En Bangalore, India, Ford explora un modelo de propiedad alternativa “comparte tu auto”, que permite a las familias o grupos pequeños adquirir y compartir un vehículo.

Con la urbanización y el crecimiento de la clase media en India, el interés en la propiedad de vehículos está creciendo, pero la falta de infraestructura y concesionarios ha disuadido a los compradores de primera vez a aceptar este sistema.

A medida que las ciudades crecen, surgen nuevas ideas. Así como algunas ciudades tratan de encontrar soluciones con transporte público, prohibiendo a los autos privados ingresar a ciertas áreas, otras buscan la manera de que en un carro viajen varias personas, no sólo una, porque si no se buscan soluciones, los embotellamientos serán interminables.